La intuición se basa en comprender algo de una forma casi instintiva e inmediata, sin la necesidad de un razonamiento consciente y elaborado. Es un pensamiento rápido asociado a emociones, de ahí que a veces se llamen ‘corazonadas’, bebe mucho de la experiencia y de conocimientos acumulados. 

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La Mente como Licuadora

Personalmente, me gusta ver el cerebro como una licuadora que contiene mucha información y rápidamente tritura toda esa información para darnos una respuesta inmediata. Si intentásemos hacer todo el proceso inverso de como hemos llegado a esa información resultaría muy laborioso y complejo. 

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Datos y Analítica vs. Intuición

En contraposición; los datos y la analítica, que a menudo suelen eclipsar cada aspecto en la toma de decisiones empresariales relegando la intuición a un segundo plano y algo a lo que no tener en cuenta. Por eso, hemos querido explorar cómo la intuición puede desempeñar un papel fundamental en la toma de decisiones y cómo puede ser aprovechada efectivamente para mejorar la estrategia de marca. Ya que sigue siendo una herramienta poderosa y a menudo muy subestimada si es utilizada de forma correcta.

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El Valor de la Intuición y los Datos

La intuición no tiene un valor absoluto, como tampoco debe tenerlo el dato. Los datos nos dan seguridad y confort que siempre anhelamos. A menudo son ilusiones en forma de control. La intuición nos da una visión más emocional, arriesgada y con un punto experiencial del mismo hecho. Y se puede manifestar con tono negativo como puede ser través de un miedo como el de perder a nuestro cliente de toda la vida con una acción arriesgada. O puede ser en tono positivo como un camino nuevo que se nos plantea, una nueva oportunidad de mercado. 

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"La intuición tiene un componente emocional, y las emociones no dejan de ser un punto importante en las transacciones comerciales, pues el consumidor compra emocionalmente".

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En  el libro ‘Seis Sombreros de Copa’ de Edward de Bono tratan todo lo emocional como uno de los seis sombreros, ya que no deja de ser una perspectiva diferente sobre un mismo hecho. Cuantas más perspectivas tengamos más fácil será la toma de esa decisión.

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La Intuición en el Branding

En el Branding, las decisiones sobre como presentar una marca a través de su identidad gráfica, (colores, logo, diseño, tono de voz, imágenes, vídeos) se ve claramente este tema. Podríamos obtener todo esto con diferentes estudios demográficos que responda a las tendencias del mercado. Pero si sólo nos dejamos guiar por esta información, tendremos una marca totalmente impersonal, que no nos representa. Una marca poco original que no aporta nada nuevo. Nuestra marca nos tiene que representar a nosotros y a menudo elegiremos de manera instintiva e intuitiva. Habrá momentos en que las dudas nos asaltarán, pero siempre tenemos que verlo de manera estadística ya que nuestra opinión y nuestros gustos conectan con los gustos y opiniones de un sector poblacional. Los valores y elementos culturales en los que vivimos penetran en forma de gustos y opiniones.

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Equilibrando Intuición y Datos

La intuición, con su componente emocional y su capacidad de sintetizar experiencias previas, es una herramienta esencial y complementaria a los datos en la toma de decisiones. Aunque los datos proporcionan una base sólida y segura, es la intuición la que aporta la autenticidad y la conexión emocional necesaria para crear marcas que realmente resuenen con el público. Al equilibrar ambos enfoques, podemos tomar decisiones más completas y efectivas, asegurando que nuestras estrategias no solo sean acertadas desde el punto de vista analítico, sino también auténticas y representativas de quienes somos.

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Descubre como usar correctamente la intuición.

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